11.11.08

Grandes momentos de la historia: Los bomberos coruñeses están bien dotados

Si el concejal ya lo dice por mi... para qué contar más.

A partir del segundo 20


1 comentario:

Anónimo dijo...

interesante notar que algunas traducciones inglesas de la Biblia[cita requerida] condenan únicamente el sexo homosexual mientras otras condenan la homosexualidad en sí, o quizá pretendan incluir tanto las relaciones gay como las lesbianas (King James: No yacerás con los hombres como con las mujeres: es una abominación. Living Bible: La homosexualidad está absolutamente prohibida, por ser un enorme pecado)

To’ebah, que suele traducirse como "abominación", es un término religioso, normalmente reservado para usarse contra casos de idolatría. Si el escritor del Levítico hubiera querido referirse a una violación moral, un pecado, quizá habría usado la palabra hebrea zimah. Una traducción alternativa a "abominación" sería "práctica de culto religioso extranjero". La traducción al griego denominada "de los Setenta" convierte to’eba en bdelygma, que significa impureza ritual. Una traducción literal del hebreo, palabra por palabra de este versículo sería: "Y con un varón tú no yacerás en camas de una mujer; es una abominación." Lo que "más que prohibir la homosexualidad, simplemente restringe dónde puede tener lugar". Esto nos puede parecer hoy día una extraña prohibición, pero es bastante consistente con otras instrucciones del Levítico que incluyen mezclas impropias de cosas que los antiguos israelitas debían mantener separadas (por ejemplo dos cultivos en el mismo campo, o géneros distintos en la misma prenda de ropa, o arar con un buey y un asno bajo el mismo yugo). La cama de una mujer era propia suya. Sólo su marido estaba permidido en ella, y sólo bajo ciertas circunstancias. Cualquier otro uso de su cama sería mancilla. (more) En varias traducciones permanece: KJV: (King James Version): "Si un hombre yace con hombres como yace con una mujer, ambos han cometido una abominación: ellos deben ser llevados a la muerte. Su sangre caerá sobre ellos. LB: (Living Bible): La pena por la homosexualidad es la muerte para ambos. Ellos la han traido sobre sí mismos.

Este versículo es esencialmente idéntico al del Levitico 18:22, excepto por la adición de la pena de muerte. Los conservadores religiosos interpretan generalmente el pasaje como la condena de toda actividad homosexual. Algunos liberales[cita requerida] creen que se refiere a la prostitución del templo. Una fuente (5) interpreta la prohibición como relativa a dos varones que tuvieran sexo homosexual en la cama de una mujer. Su traducción literal del original hebreo sería: "Y un hombre que yazca con un varón en camas de una mujer, ambos de ellos han cometido una abominación; muriendo ellos morirán. Su sangre está sobre ellos". O, modernizando el texto: "Es una abominación para dos hombres tener sexo en la cama de una mujer. Serán ejecutados; es por su propia culpa" (more)

Otro versículo dice así: KJV: (King James Version): No habrá prostituta de entre las hijas de Israel, ni sodomita de los hijos de Israel. LB: (Living Bible): No serán permitidas prostitutas en Israel, sean hombres o mujeres.

Los traductores de la versión KJV cometieron un error en este versículo[cita requerida], probablemente intencional. La palabra qadesh en el hebreo original fue erróneamente traducida como "sodomita". Qadesh significa "el sagrado" y en este contexto se utiliza para referirse a un hombre que se somete a prostitución ritual en el templo. La versión de Living Bible también contiene un error: se refiere a prostitutas en general, mientras el hebreo original se refiere sólo a las prostitutas que se someten a sexo ritual en el templo. Otras traducciones de la biblia[cita requerida] usan términos más ajustados, como prostitutas del santuario y prostitutas del culto. El término "culto" en este caso significa un tipo de servicio religioso, no un grupo maligno controlador de las mentes. El versículo entero parece condenar la prostitución ritual en el templo, sea heterosexual u homosexual, y no al sexo gay o lésbico, bien sea casual o de otro tipo de relaciones.

En el capítulo 19 del libro de los Jueces se describe un acontecimiento similar al de Sodoma. La mayor parte de los teólogos conservadores[cita requerida] considerarían este como completamente separado en tiempo y espacio de aquella ciudad, siendo las similaridades entre las dos historias simples coincidencias. La mayor parte de los teólogos liberales[cita requerida] asumirían que es simplemente una recensión de la historia original del Génesis, en diferente época y lugar, siendo ambos acontecimientos míticos.

Un levita visita la ciudad de Gibeah con sus esclavos y su concubina. Se encuentra con un viejo granjero, que le da la bienvenida. Una banda de hombres aparecen y exigen que el viejo les entregue al levita para ser asaltado o violado homosexualmente por ellos (el verbo utilizado impide aclarar el preciso significado). El viejo se niega y ofrece darles a la concubina del levita e incluso a su propia hija virgen para que sean violadas heterosexualmente. La turba acepta, y el violento trato al que la somete hace que finalmente muera. El levita corta su cuerpo en doce trozos y envía uno a cada una de las tribus de Israel, lo que origina una guerra entre los israelitas y los habitantes de Gibeah, en la que mueren decenas de miles. No hay condena al levita por sacrificar su concubina, o por cometer una indignidad con un cadáver. Jueces 20:5 enfatiza que el ánimo de la turba era matar al extranjero (el último acto de la inhospitalidad). Parece que estos pasajes condenan el tratamiento abusivo de los visitantes. Si se refiere de hecho a la actividad homosexual, entonces condenan la violación homosexual como abuso de poder, más que la actividad homosexual.

En el nuevo testamento, Pablo de Tarso es muy explícito al condenar la homosexualidad en 1-Corintios 6, 9-10: "¿O es que no sabéis que los malvados no tendrán parte en el reino de dios? No os engañéis: ni los lujuriosos, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores tendrán parte en el reino de Dios".

En un pasaje del Evangelio de San Mateo, un centurión romano solicita a Jesús que cure a su pais que yace paralizado en agonía, diciéndole que bastaría con una palabra suya. Jesús le encomia su fe, sin condenar la relación que hubiera entre ambos (sugerir esta relación es pura especulación ya que la interpretación de algunas personas sugieren una relación sexual entre el centurion y un esclavo cosa que es falsa ya que el texto bíblico no lo dice explícitamente) ahora el sugerir que Jesús no condena la practica homosexual es una premisa falsa ya que con ese mismo pensamiento Jesús que no condenó a la mujer sorprendida en adulterio (Juan 8:1-11) ¿estaría aprobando el adulterio?, cosa que sería falsa. La palabra griega pais puede interpretarse como un joven esclavo que su propietario mantiene con propósitos sexuales (otro término del mismo origen es pederastia) pero sería una interpretación acomodada. En varias traducciones[cita requerida] se ha suprimido el componente sexual del término, usando las expresiones joven sirviente o mi chico. Relaciones semejantes eran muy habituales en la época del Imperio Romano, y toleradas por la sociedad pero no toleradas por Dios. El Evangelio de San Lucas refleja la misma escena de modo ligeramente distinto: la persona enferma y cercana a la muerte es calificado de esclavo (con la palabra griega doulos), sin referencia a su edad, aunque se dice que es querido por el centurión.

La KJV traduce estos versículos (26 y 27) como: Por causa de esto, Dios les provocó una lujuria vergonzosa. Incluso sus mujeres intercambiaron relaciones naturales por innaturales. De la misma manera los hombres también abandonaron las relaciones naturales con mujeres y fueron inflamados con lujuria unos con otros, los hombres cometían actos indecentes con otros hombres y recibían en sí mismos la debida pena por su perversión. Los traductores muestran otra vez sus prejuicios: la palabra griega physin se traduce como innatural, lo que implica que el acto es moralmente condenable; pero una traducción más ajustada podría ser lo que está más allá de lo usual y ordinario, en el sentido de no convencional.

Versículo 23: La gente había sido descrita alguna vez como seguidores de Dios, pero habían perdido la fe. Hacían imágenes de dioses paganos en forma de hombres, aves, animales y reptiles para sus rituales religiosos, probablemente en sus templos. Versículo 24: Después, se involucraron en orgías sexuales unos con otros como parte de esos rituales paganos. Versículo 25: Dieron culto a las imágenes que habían hecho, en vez de a Dios el creador, por causa de estas prácticas prohibidas. Versículo 26 y 27 (los comentados arriba). Ellos (hombres y mujeres) fueron entonces castigados de alguna manera por su perversión. Hay diversas interpretaciones sobre el significado exacto de la palabra "perversión" y "tales cosas" (versículo 30). Pablo (?) puede estarse refiriendo a:

* todas las actividades homosexuales en toda circunstancia (cristianismo conservador)
* todas las actividades homosexuales fuera de una relación entre dos personas comprometidas: el sexo casual estaría prohibido, pero el sexo gay y lésbico con un compañero de por vida no.
* las prácticas homosexuales en grupo por miembres de una concgregación heterosexual u homosexual durante los rituales religiosos, como era práctica extendida en las religiones paganas de la Antigüedad.

Los cristianos liberales tienden a interpretar el pasaje con alguna de las últimas opciones. Algunos comentadores[cita requerida] interpretan de otra manera: en la sociedad grecorromana, la bisexualidad era vista como natural; se esperaba de la gente en determinados contextos que se involucraran en relaciones bisexuales. Si la mayoría eran heterosexuales, esto iría en contra de su personal naturaleza (en la Universidades estadounidenses en la actualidad existe una práctica denominada "lugs" -Lesbians Until Graduation- que parece poder ilustrar tal cosa[cita requerida]). Otra fuente (6?)[cita requerida] propone que Dios nos creó a cada uno con orientación sexual. Inentar cambiarla es, de hecho, decir a Dios que nos ha creado mal. La creación no nos da el derecho de recrearnos a nosotros mismos. Algunos[cita requerida] interpretan hombre... con otro hombre como una traducción de la palabra griega pederastia que se practicaba comúnmente en la época por varones adultos con niños varones (usualmente esclavos). Así Pablo (?) estaría criticando el abuso sexual de niños.