¡Lorena! ¡Lorena!

Esto del cambio climático es la leche. Antes, la gente por estas alturas estaba tranquilita y con la líbido más o menos bajo control... pero ahora la cosa está más jodida y la primavera llega antes

Por ejemplo, el paisano que acaba de correr corriendo calle arriba y calle abajo la avenida en la que vivo (y es empinadilla) profiriendo un "¡Lorena! ¡Loreeenaaaa!" tras otro sin que sus cuerdas vocales parecieran resentirse.

También debe ser el culpable del espectacular aumento de visitas en este blog, ya que desde que hablé del Carnaval de Río, todo el mundo se acerca a él en busca de garotas haciendo topless o participando en espectáculos porno. Me sorprendería si alguno de ellos se molestase en leer el texto.

O de esas crías de quince años que ves por la calle con unas pintas ciertamente escandalosas (no por lo que muestren o dejen de mostrar, sino porque son una ofensa para los ojos: he visto papagayos más discretos y con menos colores). El caso es llamar la atención.

O para los calores que se respiran en la vida política española (sé que tengo un par de post pendientes y a medio redactar sobre esto... pero me da tanta pereza hablar de asnos).

En fin, al menos volveremos antes a la playa...