Si hay algún carnaval que excita la imaginación de la gente, ese es el de Río de Janeiro (Brasil).
Hasta hace algunos años se podía seguir por la televisión portuguesa (concretamente, por la SIC), y como el idioma es el mismo, salvo ciertos insertos de apolillados cómicos lusos (como Herman José y otro aún más grimoso cuyo nombre he conseguido olvidar), pues el programa venía siendo un resumen de lo que emitía Globo TV... un resumen de 8 horas repartidos en dos tandas de cuatro. Toda una maratón.
La gente, cuando se le menciona el carnaval de Río, inmediatamente piensa en mulatas en tetas bailando al son de la samba... cómo hicieron los comentaristas que Telecinco tenía para la única vez que les dio por ofrecer el resumen.
Y aunque es cierto que esto se ve, ni se ve tanto, ni es lo principal en los Carnavales cariocas (los de Río son cariocas, los de São Paulo paulistas, Belo Horizonte gaúchos, etc.). Lo cierto es que toda una parafernalia y toda una mitología está construida alrededor de las carrozas.
En primer lugar, el lugar del desfile es una avenida de kilómetro y pico de largo que se llama "Marqués de Sapucaí", o más popularmente, el Sambódromo.
Cada una de las 14 escuelas de samba de primera división que desfilan tienen unos 45 minutos para recorrer el Sambódromo. Y sí, hay divisiones inferiores, ascensos y descensos. Como en el fútbol. Y por supuesto, también hay un campeón, que en 2006 fue Vila Isabel, que había terminado empatada con Grande Río, pero en uno de los criterios de desempate la superaba.
Sigamos. Esa musiquita machacona y repetitiva que cantan los que desfilan es lo que se conoce como el enredo. Las dos primeras veces que vi el Carnaval por televisión se tomaban la molestia de poner la letra sobreimpresa, lo cual es de gran interés porque ayuda a comprender mejor lo que pasa sobre el asfalto, ya que todo el desfile es una historia que van contando a los espectadores. Si buscáis por la mula, seguro que podéis encontrar las letras y las canciones de los enredos, y con un poco de suerte ya estarán los de este año.
La caravana se puede considerar como un ejército en miniatura, ya que está dividido en alas, que equivaldrían a batallones, y aunque varían de año a año y de disfraz, lo cierto es que hay algunos elementos comunes.
Lo primero que vemos en un desfile es el llamado casal portabandeiras, que es una pareja que bailando (y con un disfraz bastante reconocible a pesar de los cambios de color y ciertos retoques) llevan el estandarte de su escuela.
A continuación vendrá una primera ala y después el carro abrealas, que vendría siendo la primera de las carrozas. Sobre las carrozas veremos a hombres y mujeres bailando en posiciones destacadas... cómo no podría ser de otra forma, se llaman destaques.
Otra ala clásica es el ala de las baianas, que también llevan un disfraz bastante típico y que está compuesta por las mujeres de más edad (y peso) de la escuela. Tienen el aspecto de la criada de Scarlett O'Hara, para entendernos.
El encargado de coordinar todo esto, el general de nuestro ejército es el llamado "carnavalesco", que con su enredo y su imaginación consigue plasmar una historia y transmitirla a los espectadores. Porque todo el desfile no es más que una historia que se cuenta.
Un caso paradigmático fue el de 2001, cuando se cumplía el 5º Centenario del descubrimiento de Brasil. ¿Adivináis la temática?
Pues ese año una escuela tipo empezaba hablando de los indios y la naturaleza, de cómo los españoles descubrieron las costas y cómo los portugueses los conquistaron. De cómo consiguieron la independencia y se transformaron en una república o cómo adquirieron los esclavos la libertad por mediación de una princesa.
ASí, teníamos el ala de los conquistadores, de los bandeirantes, de los garimpeiros, el carro de la emperatriz (Isabel I de Braganza, la princesa que liberó a los esclavos)... y el enredo evoluciona para ir contando todo esto. ¿Os hacéis una idea?
Y sí, hay bastantes señoritas en tetas por aquí y por allí (en las carrozas, entre alas), pero menos de las que pensáis y no se les da tanta importancia como la gente pudiera creer, aunque no se les permiten según que licencias, como podéis leer en esta noticia, acerca de una destaque de Estácio de Sá (escuela que no conocía y debe ser una de las ascendidas de este año) que protagonizó un film porno.
Hablando de tetas, como curiosidad deciros que el topless está mal visto en las playas brasileñas (por eso muchas modelos muestran el típico triangulito del bikini cuando posan desnudas).
Pues nada más, para ampliar información, en la página que Terra Brasil preparó para este año. Está en portugués pero no debiera representar un obstáculo insalvable para cualquiera que tenga interés.
Mañana seguimos en Brasil y nos vamos hasta Bahía, dónde hay un carnaval completamente diferente a este
1 comentario:
Neno, mira o correo de gmail pero xa, se é que non o fixeches xa. É urxente xD.
Que si cona, que é urxente.
(despois se iso borra este comentario xD)
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